CALIFORNIA, Estados Unidos.- El comediante Roman Atwood se ha ganado la popularidad que tiene dentro del canal YouTube por sus bromas con cámaras ocultas, aunque esta vez ha cruzado algunos límites y sus propios fans lo han criticado duramente.

Ocurre que su última chanza tiene como víctima a su propia esposa, a quien le hace creer que mata a su pequeño hijo, en un accidente doméstico.

Primero, el hombre se encarga de que ella lo vea jugando junto al pequeño, disfrazado de “SpiderMan”. Luego, le pide a su mujer que le acerque un poco de agua, y en ese momento aprovecha para esconder al niño y reemplazarlo por un muñeco vestido exactamente igual, al que arroja “accidentalmente” por encima de una baranda.